La Peregrina
La Peregrina es una de las joyas más antiguas pertenecientes a clásicas casas de monarcas, básicamente a casas reales, a la realeza.
Es una de las perlas que más murmullos e historias ha mantenido a su alrededor, y que ha tenido una trayectoria más que interesante.
Un esclavo del golfo de Panamá a principios del siglo XVI encontró una joya, una perla que le dejó como nombre La Peregrina . Este esclavo hizo que llegara a las manos de su majestad el magnífico rey Felipe II.
Felipe II, viendo la perla hermosa, la colgó al cuello de María Tudor de Inglaterra, como un regalo de boda. Fue entonces cuando esta magnífica alhaja empezó a desfilar por los mejores cuellos de la más alta estirpe.
Muchas de las reinas españolas desfilaban de un sitio a otro vanagloriándose de esta magnífica perla, hasta que un día, cayó sobre la realeza francesa y posteriormente sobre la realeza inglesa.
Fue en tierras protestantes cuando la joya viajó por el océano hasta caer en manos de los americanos que tras una subasta cayó sobre las manos de Richard Burton, que por si no lo conocéis fue el marido de la famosa actriz Liz Taylor, que la entregó a Cartier para que la integrara en un collar de diamantes y rubíes.
Como todos sabemos o deberíamos saber, la famosísima actriz falleció el año pasado, dejando un recuerdo hermoso y maravilloso de su paso por el mundo del cine.
Debido a esto, en septiembre de 2011 La Peregrina volvió a ponerse a la venta en una subasta, llegándose a vender por la cantidad de 9 millones de dólares.